Importancia
de la química: lectura adaptada de diversas
fuentes.
Existe en nuestra sociedad, la idea del científico como
una persona rara, extravagante, muy inteligente. Hay quienes creen que sólo
unos pocos están en condiciones de acceder a los conocimientos científicos. La
idea de la ciencia para unos pocos.
Sin embargo esta es una imagen distorsionada de la actividad científica, ya que la ciencia
se desarrolla por el trabajo grupal de
equipos de científicos, que cumplen su labor en un determinado contexto
histórico y social. La ciencia es para todos.
Los jóvenes, al finalizar sus estudios secundarios deben
poseer una cultura científica básica, independiente de la carrera o profesión
que pretendan continuar. Muchos años atrás se consideraba culta a la persona que
sabía leer y escribir, ahora eso sólo no alcanza. Nuestro mundo es cada vez más
complejo.
Para que un país se desarrolle democráticamente, necesita
que sus ciudadanos sean capaces por ejemplo:
- leer críticamente un
artículo periodístico que trate temas tales como el uso de insecticidas, la fabricación de un
nuevo plástico o la restauración de una pintura o un libro antiguo,
- opinar y optar
libremente, por ejemplo acerca de la conveniencia o no de la instalación
de un basurero nuclear o de la compra de un detergente o de una leche.
Recordemos que hace no muchos años, para comprar leche, por ejemplo, no se
requería de conocimientos especiales mientras que ahora, cuando nos
acercamos a la góndola de productos lácteos de un supermercado, nos encontramos no sólo
con diferentes marcas de leche sino con leche entera, leche descremada,
leche con hierro, leche vitaminizada, leche larga vida, etc. Y debemos ser
capaces de elegir racionalmente que producto comprar,
- Nuestros países requieren
usuarios inteligentes de los productos que la sociedad y la tecnología les
ofrece, es decir que no puedan ser erróneamente influenciados por la
publicidad o la moda.
- Lamentablemente, la idea
de química en nuestra sociedad se asocia
muchas veces como algo negativo. Esto se aprecia cuando se
promocionan productos diciendo que no contienen “químicos” En muchas
oportunidades, la propaganda relaciona la química con algo malo,
vinculando lo artificial con lo dañino, como si todo lo natural fuera
bueno y todo lo artificial (sintético) fuera malo.
La química es la ciencia de la materia y de los cambios que esta puede experimentar.
El mundo de la química abarca por consiguiente todo lo material a nuestro
alrededor: las piedras sobre las que nos paramos, la comida que comemos, la
carne de la que estamos hechos y el silicio con los que fabricamos las
computadoras. No existe nada material fuera del alcance de la química, ya sea vivo o muerto, vegetal
o mineral, sobre la Tierra
o en una estrella distante.
Solo tenemos que mirar a nuestro alrededor para apreciar
el impacto de la química sobre la tecnología y la sociedad. Durante los
primeros tiempos de la civilización, cuando la Edad de Piedra dio lugar a la Edad de Bronce y luego a la
edad de Hierro, las personas no advertían que estaban haciendo química cuando
transformaban el material que encontraban en forma de piedras - hoy denominadas
minerales – en metales. La posesión de los metales les dio un nuevo poder sobre
el medio ambiente y la naturaleza traicionera se volvió menos brutal. Los
elementos decorativos de la civilización surgidos del arte de la transformación
de los materiales se multiplicaron: el vidrio, las joyas, las monedas, la
cerámica e inevitablemente las armas se volvieron más variadas y efectivas. El
arte, la agricultura y el armamento se tornaron más elaborados. Nada de esto
hubiera sucedido sin la química.
El desarrollo del acero aceleró el profundo impacto
de la química sobre la sociedad. La
obtención de aceros de mejor calidad condujo a la Revolución Industrial ,
en la que la fuerza muscular cedió su lugar al vapor y se produjo el
surgimiento de empresas gigantes. Con el transporte perfeccionado y la
creciente producción industrial se desarrolló un comercio más extensivo y el
mundo se tornó simultáneamente un lugar más pequeño pero más activo. Nada de
esto hubiera sucedido sin la química.
Junto con el siglo XX, y actualmente con el siglo XXI,
sobrevino un enorme progreso en el desarrollo de la industria química: La
química transformó la agricultura. Los fertilizantes sintéticos proporcionaron
los medios para alimentar la enorme y creciente población del mundo. La química
transformó la comunicación y el transporte. Luego, en forma vigorosa y
sostenida, que se mantiene en el siglo actual, la química proporcionó
materiales avanzados, como los polímeros para los tejidos, el silicio de alta
pureza para las computadoras y el vidrio para las fibras ópticas; la química
desarrolló combustibles más eficientes y renovables. Proporcionó las aleaciones
livianas y resistentes necesarias para las aeronaves modernas y los viajes
espaciales. La química transformó la medicina, prolongó sustancialmente la
expectativa de vida y proveyó los fundamentos de la ingeniería genética. La
profunda comprensión de la vida que se está adquiriendo a través de la biología
molecular es actualmente una de las áreas más vibrantes de la ciencia. Ninguno
de estos progresos podría haberse logrado sin la química.
Sin embargo, el precio de todos estos beneficios ha sido
elevado. Por ejemplo, el rápido crecimiento de la industria y la agricultura ha
desgastado la Tierra
y dañado nuestro patrimonio. Actualmente hay preocupación generalizada respecto
a la preservación de nuestro extraordinario planeta. De nosotros depende que la
utilización de la química sea para construir sobre lo que ya se ha logrado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario